Ciento setenta empleados fueron cancelados ayer en Radio Televisión Dominicana.

La información la ofreció Johnny Rosario, presidente del Círculo de Locutores Dominicanos, quien expresó que entre los cesanteados hay tres locutores.

Calificó la medida de arbitraria y pidió al director de la radiotelevisora oficial, Adriano Rodríguez, reponer en sus puestos a los cancelados, especialmente a los tres locutores.

Manifestó que los hombres del micrófono que fueron cancelados realizaban una buena labor y tienen varios años laborando en la planta estatal.

Agregó que esos comunicadores realizan un trabajo profesional, y no tienen ninguna militancia política, razón en que basa su solicitud de reposición.

Los locutores cancelados son Manuel Alcántara, Manuel Ferreras y Haisser Veras Pichardo.

Defendió el derecho que como profesionales y dominicanos tienen a un empleo para satisfacer sus principales necesidades.

El presidente del Círculo de Locutores Dominicanos apuntó que la medida de cancelar 170 empleados en Radio Televisión Dominicana llevará hambre a los familiares de los despedidos de sus puestos.

Manifestó que Adriano Rodríguez, director de RTVD no debió cancelar a los tres locutores, en virtud de que pertenecen a su clase, porque él (Adriano) es miembro del Círculo de Locutores Dominicanos.

Johnny Rosario expresó que Adriano puede realizar un buen trabajo en la radiotelevisora oficial, pero que medidas por las de ayer le perjudican su imagen.

Consideró plausible la actitud de Adriano Rodríguez de no cobrar un solo centavo en su cargo, pero que esto debe complementarlo tomando medidas acordes con el momento, no cancelando a profesionales del micrófono.

La medida ha tomado por sorpresa a algunos sectores que pensaron que no se producirían cancelaciones masivas, por la forma reiterativa en que lo ha dicho el presidente Joaquín Balaguer y ratificado por sus más cercanos colaboradores.

Las cancelaciones parecen adelantarse a las declaraciones de la Secretaria Administrativa de la Presidencia, Minú Torres, quien había expresado que la semana próxima se colocarían los "compatriotas" en los cargos de la administración pública.

Esos pronunciamientos de Minú han creado cierto malestar en la empleomanía estatal, que espera que el lunes se le entregue su cheque con la cancelación.

El gobierno anunció ayer que pagará los cheques el lunes de forma personal, para detectar las irregularidades en las nóminas de la administración pública.

Los ataques de nervios se adueñan de todos los empleados públicos pensando si pasarán la barrera de la próxima semana.